El comando
cierra la imagen activa. Si la imagen no está en la ventana principal, entonces también se cierra la ventana. Si la imagen está en la ventana principal, la imagen se cierra pero la imagen permanece, vacía.Cerrar una imagen no se puede deshacer: una vez cerrada, todo se va, incluido el historial de deshacer. Si la imagen no es “limpia”, es decir, si ha hecho cambios en ella, desde la última vez que la guardó, se le preguntará para que confirme si realmente quiere cerrarla. Tenga en cuenta que una imagen se marca como limpia cuando se guarda en un archivo, aunque el formato de archivo elegido no preserve toda la información de la imagen, así que es una buena idea pensar por un momento sobre lo que está haciendo antes de cerrar una imagen. Si hay la mínima posibilidad de que se arrepienta de esta operación, no puede perjudicarle guardar una copia como un archivo XCF.
Puede acceder a este comando desde la barra del menú de la imagen a través de
→ ,o usando el atajo de teclado Ctrl+W.
Para la mayoría de los sistemas sobre los que funciona GIMP, también puede ejecutarlo pulsando sobre el botón “Cerrar”, en algún lugar en la barra de título de la ventana de la imagen. La ubicación y apariencia de este botón la determina el sistema de ventanas y el gestor de ventanas.
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Nota |
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Si cierra una ventana de imagen, como se describió más arriba, GIMP simplemente cierra su imagen. En cambio, el hecho de cerrar la ventana de la caja de herramientas provoca que se cierre GIMP. |